Om̐ namaḥ śivāya

Al fin un mantra fácil, no?

Bueno, no sé si para vos será tan fácil pero a comparación de otros es bastante amable 🤭

Te preguntarás ¿de qué se trata Om Namah Shivaya?

En primer lugar, una de las forma de transliterar correctamente este mantra sería: Om̐ namaḥ śivāya, pero su pronunciación es más fácil cuando leemos Om Namah Shivaya, aclarando que esa «h» de namah suena como una h muuuuy suavecita casi sin sonido y la Y de Shivaya suena como una i latina. El resto no tiene más ciencia.

Literalmente el mantra significa «Salutaciones a Shiva» y tiene varias interpretaciones posibles:

Por un lado, podríamos pensar este mantra como una forma de reconocer, saludar, honrar al Dios Shiva, ese aspecto de lo divino que, de acuerdo a los hindúes, encarna la energía de transformación, movimiento, destrucción. Simbólicamente se representa así 👇

De acuerdo a esta interpretación, podríamos pensar que al decir «Om Namah Shivaya» estamos invocando o despertando en nosotros ese potencial de energía transformadora, que permita destruir lo que no nos sirve, que habilite el cambio cuando lo necesitemos.

Pero también, para algunas corrientes del hinduísmo, Shiva es una forma de denominar al principio primordial de la existencia, la Consciencia Absoluta o el Ser.

De manera que con esta interpretación, al decir «Salutaciones a Shiva» no estamos invocando a nada externo sino reconociendo, honrando o saludando a lo que hay de Real en nosotrxs, a esa consciencia que nos sostiene, a nuestra verdadera esencia.

Podríamos traducir entonces Om Namah Shivaya (tomándonos algo de licencia poética) de esta manera, por ejemplo:

«Reconozco que más allá de todo lo que en mí se modifica y cambia,
hay una consciencia estable en la que habito.
Me inclino ante esa consciencia.»

 

por Gabriela Mangone

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